El Jardín de la Cuesta de Gato - Febrero 2023

Ha llovido bastante bien y con una temperatura nocturna de 11° C hacía bastante fresco. Normalmente hace un clima agradablemente templado cerca de la costa en la Isla Bonita, incluso en invierno, pero no solo estaba helado y ligeramente nevado en nuestra montaña más alta, el Roque de los Muchachos, sino también en Tenerife. Desde allí, el Teide aún nos saluda con su pico blanco y envía aire fresco invernal.

La lluvia le ha hecho bien a las plantas, todo está brotando. Realmente no había mucho que hacer en el jardín. Lo más importante era quitar las malas hierbas y cortar la maleza para mantener los caminos y los semilleros más o menos despejados. 

 La lechuga se ha vuelto demasiado densa. Mi marido la había sembrado siguiendo el lema "más vale mucho que nada". Esto dio lugar a muchas comidas con brotes y hojas tiernas... Por supuesto, también trasplantamos bastantes plantas. Me sorprendió descubrir que en el arriate se había colado hilo del diablo.

Este parásito para mí es el peor. Nunca he visto el hilo del diablo en Barlovento, en el noreste de la isla, pero parece ser común en el sur. La primera vez que me fijé en ella fue poco después de mudarnos a Malpaíses, cuando la descubrí en un verode. Se enredó en el tronco y las hojas de la planta, de un metro de altura, las envolvió y colgaba de ellas como una telaraña. Daño tanto a la suculenta que se murió. A partir de ese momento supe que tenía que mantener los ojos abiertos...
 

La enredadera del diablo depende absolutamente de su planta hospedadora porque no es capaz de realizar la fotosíntesis por sí misma. El parásito no tiene raíces, sólo hojas diminutas y, como todas las plantas parásitas, extrae nutrientes de su planta huésped. Esto lo hace con órganos chupadores especiales, literalmente se "pega" a su huésped.

Según un informe del Instituto Max Planck, el hilo del diablo detecta cuándo florece la planta que está siendo asediada y coordina su floración con la suya. Solo puedo confirmarlo, ya sea en las tederas o las margaritas.

 Mi opinión personal y solución al problema: arrancar por completo todas las plantas hospedadoras infestadas (sobre todo los tréboles, pero también pueden ser tomates o incluso Aeonium), si es posible antes de que la enredadera del diablo abra sus propios botoncitos de flor. Yo no tiro nada de eso al compost, sino todo a la basura.

Curiosamente, la hierba del diablo se utiliza en la medicina popular de las Islas Canarias. Se dice que es diurética, laxante, cicatrizante y que también ayuda con la tos, las afecciones bronquiales y hepáticas.

 El 2 de febrero, día de la Virgen de la Candelaria (patrona de las Canarias), se podan tradicionalmente las viñas. Para nosotros fue muy rápido, porque solo tenemos una vid.

Algunos de nuestros árboles (aguacate, mango, melocotón, etc.) los plantamos el año pasado y aún no necesitan poda. En cambio, podamos los arbustos autóctonos como la lavanda canaria, la vinagrera y el incienso canario, ya que se extendían demasiado. Ahora son más densos y resisten mejor los vientos alisios del noreste.

Retrasé un poco la poda de las rosas, porque habían empezado a florecer de nuevo.

Romero, varios tipos de salvia y menta, tomillo, capuchina, cilantro, albahaca: todos crecen magníficamente. Ah, y otros tienen malas hierbas: nosotros tenemos perejil. Es increíble lo vigoroso que es y dónde está apareciendo por todas partes.

Las habas están empezando a florecer, la col abierta está disponible todo el año, hemos cavado las primeras papas de este año, desgraciadamente muchas de las batatas han sido víctimas de las ratas y pocas quedan para nosotros, las zanahorias están listas para la cosecha. Hay guayabas rojas, physalis y los primeros nísperos.
 

Mi amiga Christel Oswald de La Palma Kaleidoscope me animó a unirme a su Taller de Plantas. La apoyo plenamente. Presentamos a los participantes algunas de las plantas silvestres y de jardín actuales (autóctonas de la isla y exóticas). En febrero ya empieza la abundancia de plantas, sobre todo después de las buenas lluvias del invierno.

Teníamos lechuga de cabra, vinagrera, lavanda, marañuela, laurel autóctono y nobile, hinojo, margaritas, acebiño, cineraria, malpicas, chícharo e incluso una flor del bicácaro (Canarina canariense) del jardín de Christel ...

Christel narró principalmente, yo traduje para nuestros participantes hispanohablantes y añadí algunas cosas.

El primer evento se centró en el laurel canario y los que quisieron pudieron hacer la base para un aceite de especias con laurel, orégano y/o pimiento picante.

El segundo taller consistió en conocer más de cerca las plantas que habíamos traído mirándolas, tocándolas, oliéndolas e incluso mordisqueando algunas.

Espero con ilusión la próxima cita, en marzo, con más plantas del Jardín del Edén de la Isla Bonita. Quizá vuelva a traer algunas del Jardín de la  Cuesta del Gato...